Con poco tiempo para prepararse ante un partido contra el mejor equipo de América, el director del seleccionado colombiano, José Néston Pekerman, emplea hoy todo su arsenal técnico para garantizar mañana el triunfo premundialista ante Chile.
El entrenador argentino trabaja con la selección desde el lunes en la cancha de Universidad Autónoma del departamento Atlántico de manera diferenciada, a todas luces poniendo énfasis en su alineación regular y alternativamente estudiando las posibilidades de la banca para ahora y futuros compromisos, como el del próximo martes ante Argentina.
La víspera reunió en doble sesión a los estelares James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado, Carlos Bacca, Luis Fernando Muriel, Jeison Murillo, Carlos Sánchez, Dávinson Sánchez, Jonathan Copete, Yerry Mina y Frank Fabra.
Para conformar el once nacional sólo le faltó el estelar portero David Ospina, del Arsenal británico, quien todo el mundo sabe que tiene su puesto de regular más que asegurado.
El interés del ‘viejo zorro’ es como poder desarmar a toda costa, con la mejor ofensiva de que dispone, a la Furia Roja, con ese aval de dos títulos continentales sucesivos que trae.
Con ese grupo se concentró en trabajo combinado de campo, donde se hicieron ejercicios de velocidad, tareas de repetición, pases a un primer toque y otras prácticas más de jugadas prefabricadas.
El resto del seleccionado, que ya está completo para el partido oficial en el reacondicionado estadio metropolitano Roberto Meléndez, realizó trabajos de preparación física y readaptación a las condiciones del clima de la ciudad de Barranquilla.
Ese grupo estuvo encabezado por Ospina, Santiago Arias, Sebastián Pérez y Radames Falcao, el carismático futbolista costeño que se reincorpora al elenco tras una exitosa racha actual con su club Monaco, de la liga francesa.
Para no pocos aficionados en Colombia, la separación en el fogueo del Tigre de la élite del conjunto, podría ser un indicio de que no jugará como regular contra los chilenos, aunque si como elemento de reserva y cambio en el momento que se requiera imprimir garra al once cafetero.
Mientras, lo propio hacen los jugadores chilenos que ya se encuentran en Barranquilla desde ayer, con sus primeras sesiones de práctica en el abrasador clima del Caribe colombiano.
Uno de los tópicos que más se menciona en los medios futbolísticos aquí es la ausencia por lesión en la formación austral del delantero Alexis Sánchez, quien según reporteros chilenos el técnico Juan Antonio Pizzi podría sustituir por Esteban Paredes, goleador del Colo Colo; o Nicolás Castillo, máximo artillero de la Universidad Católica.
Como también ocurre siempre previo a este tipo de encuentro, la hinchada colombiana recuerda este miércoles cómo marcha la historia de los enfrentamientos entre ambos países en este tipo de eliminatoria, como si fuera la guía sagrada sobre lo que puede suceder mañana.
Así, se recuerda que colombianos y chilenos se han enfrentado en 13 oportunidades en eliminatorias mundiales de Sudamérica, con balance de cuatro empates, cinco triunfos para el tricolor y cuatro para los chilenos, con 23 anotaciones de la antigua Nueva Granada y 27 de los visitantes.
Sin embargo, los seguidores de la selección local, sobre todo los de la llamada tercera edad, recuerdan como una gran pesadilla para Colombia la vez en que la Roja goleó a la Amarilla, un 1 de agosto de 1965 en Santiago, por siete tantos a uno.
Sin embargo, todo ello es agua pasada; la nueva historia se hará mañana en la cancha del barrio de Los Girasoles de la capital atlántica.
Bogotá, 9 de noviembre 2016
Crónica Digital / PL