Luego de más de 20 años de espera, Chile tiene desde hoy una Ley de Voto en el exterior, promulgada por la presidenta de la República, Michelle Bachelet, y que abre el camino al sufragio general a partir de 2017.
La legislación guarda cierto simbolismo, porque dará cabida a todos los chilenos residentes en el extranjero a ejercer su voto en los comicios presidenciales y parlamentarios del próximo año, algo impensado en tiempos de la dictadura (1973-1990).
Precisamente como consecuencia de la represión contra los opositores del régimen de Augusto Pinochet, miles de chilenos debieron pedir asilo político en numerosos países del mundo.
Bachelet encomió “la larga lucha que han llevado a cabo nuestros compatriotas en el extranjero para lograr que su derecho a voto se reconozca (…) ejemplo para todo Chile (…), con una nube que ensombrece nuestros procesos electorales”.
La mandataria estuvo acompañada en la ceremonia de firma de la legislación por los ministros de Interior, Mario Fernández; Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz; Secretaría General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre; y Hacienda (s) Alejandro Micco.
“Después de tanto tiempo y esfuerzo vamos a ser testigos y protagonistas de un hito que hace más fuerte nuestra democracia”, comentó Bachelet.
El sufragio universal es la primera sílaba de nuestra democracia, es la manifestación concreta de la soberanía de un pueblo y uno de los más esenciales ejercicios cívicos; la legitimidad y la participación son inseparables en democracia, precisó.
La ley permitirá a 450 mil chilenos en el exterior votar en elecciones presidenciales, en las primarias presidenciales y en los plebiscitos nacionales.
Para participar de los comicios los chilenos residentes en el extranjero deberán inscribirse en el consulado que les corresponda o ante la jefatura de extranjería y policía internacional al entrar o salir del país.
Santiago de Chile, 7 de octubre 2016
Crónica Digital / PL