Fernando Veloso, jefe de la Policía Civil en Rio de Janeiro, desmintió la versión presentada por Lochte, Gunnar Bentz, Jack Conger y James Feigen sobre un supuesto robo a mano armada, tras sair de una fiesta en la madrugada del pasado domingo.
Sin embargo, algunas inconsistencias en la historia hicieron que una jueza local ordenara la requisa de los pasaportes de los nadadores, dos de los cuales fueron bajados del avión en que planeaban regresar a Estados Unidos.
Varios testigos que callaron de entrada confirmaron luego los desmanes de los nadadores norteamericanos, y explicaron que habían guardado silencio por el perfil alto de los implicados.
Bentz, Conger y Feigen fueron detenidos y liberados poco después, sin embargo las autoridades siguen sin dar con Lochte, uno de los máximos ganadores de medallas en la historia de los Juegos Olímpicos.
Rio de Janeiro, 19 agosto 2016
Crónica Digital / PL