La Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos de Chile (AFEP) expresó hoy su satisfacción por el anuncio de juicio contra el exmilitar de la dictadura de Augusto Pinochet, Pedro Barrientos, acusado de asesinar al cantautor Víctor Jara.
La presidenta de esa organización, Alicia Lira Matus, comentó que el suceso representa un gran avance en términos de lo que significa el crimen de Víctor Jara o cualquier crimen en el que se haya evadido la Justicia en nuestro país.
La muerte del cantante es uno de los casos más emblemáticos de las violaciones a los derechos humanos cometidas en Chile durante la dictadura (1973-1990), sentenció la activista.
Cifras oficiales indican que en el periodo unas tres mil 200 personas murieron a manos de agentes del régimen, de las cuales mil 192 figuran aún como desaparecidos, y más de 33 mil como secuestrados, torturados y encarcelados por causas políticas.
El juicio civil tendrá lugar el próximo 17 de junio en Florida, Estados Unidos, aunque el caso está abierto desde 2013, añadieron los reportes de la prensa.
En el proceso legal, la viuda e hijas del cantautor demandan compensación económica por los daños emocionales que sufrieron tras su muerte en el estadioChile en 1973, un polideportivo techado que actualmente lleva el nombre del artista.
Dicho lugar fue un centro de detención y tortura tras el levantamiento militar y el derrocamiento del Gobierno de Salvador Allende (1970-1973), y en el momento del asesinato de Jara, Barrientos era uno de los encargados de custodiar a los prisioneros ahí.
Víctor Jara fue detenido junto a profesores y alumnos de la Universidad Técnica del Estado, donde era docente, y apresado en el estadio donde fue torturado y acribillado con 44 balazos el 16 de septiembre de 1973, cinco días después del golpe del general Augusto Pinochet.
La demanda dice que Barrientos puso a Jara un arma detrás de la cabeza y “jugó a la ruleta rusa”, colocando varias balas de forma aleatoria en el tambor del revólver.
El ex militar puede ser juzgado en el país norteamericano porque se mudó en 1989, con el tiempo adquirió la doble nacionalidad y en el presente reside en Deltona (Florida).
El Gobierno chileno en 2012 presentó su caso legal contra Barrientos y otros siete antiguos oficiales por responsabilidad en la muerte de Víctor Jara, abriendo una solicitud de extradición y orden de captura internacional.
Santiago de Chile, 4 de junio 2016
Crónica Digital / PL