Hasta el extremo norte del país llegaron los diputados de la Comisión de Cultura, para realizar una sesión especial en la comuna de Camarones y entregar su apoyo oficial a la petición de declaración de patrimonio de la humanidad para las Momias de Chinchorro.
“Fue una sesión extraordinaria, en la que pudimos recabar muchos más antecedentes, escuchar a las autoridades locales y reunir todos los datos necesarios que avalen la petición. Como diputados de la comisión, apoyamos férreamente la declaración de patrimonio de la humanidad, pues se trata de un legado histórico importantísimo” declaró el diputado Ramón Farías.
“Adherimos con fuerza a la campaña #YoFirmoChinchorro, porque creemos que cuentan con todos los factores necesarios para ser considerados patrimonio mundial. Se trata de una expresión única en el mundo, es uno de los dos hallazgos más antiguos de grupos de cazadores, ni menos con la preservación de éstas; además, su sistema de tratamiento de los cuerpos para momificarlos es de una habilidad increíble. El país entero, y obviamente nosotros como legisladores, trabajaremos para conseguir la protección necesaria para este fundamental tesoro histórico y patrimonial” señaló Farías.
La comitiva, que la conformaban los diputados Farías, Roberto Poblete y Vlado Mirosevic, entre otros, llegaron hasta Camarones, donde fueron recibidos por el alcalde Iván Romero y el Secretario Ejecutivo del expediente, académico de la UTA, Sergio Medina.
Recorrieron los principales sitios arqueológicos, donde se han encontrado los vestigios más antiguos de la cultura chinchorro, como las momias con una data de 7.000 años atrás y pudieron conocer el entorno que albergó a esta cultura y que se mantiene hasta hoy intacto.
Cultura Chinchorro: Valor Universal Excepcional
Los vestigios de esta cultura se han encontrado en todo el borde costero de la región de Arica y Parinacota, pero en particular en la ciudad de Arica y la Caleta de Camarones, siendo ésta última uno de los dos lugares del mundo, junto a uno en Japón donde se han encontrado vestigios más antiguos de grupos humanos de cazadores recolectores.
Uno de los aspectos culturales más interesante de Chinchorro fue su complejo sistema funerario. Estos pescadores comenzaron a momificar artificialmente a sus muertos, práctica cultural que perduró por 3.500 años (ininterrumpida, es decir más de 140 generaciones). La preparación del cuerpo para la otra vida fue una creación a veces increíblemente sofisticada. Los cuerpos eran completamente desarticulados para ser posteriormente reensamblados y decorados artísticamente.
Por Pamela Cárcamo A.
Crónica Digital, 22 de Junio 2015