Investigadores de la Universidad de Australia Occidental (UWA) explicaron hoy cómo las hormigas ven en colores, un avance que algún día podría ayudar a los científicos a crear robots más autónomos.
Yuri Ogawa y Jan Hemmi de la Escuela de Biología Animal de la UWA, mostraron por primera vez cómo las hormigas toro australianas tienen (como los humanos) tres tipos de fotorreceptores sensibles a diferentes colores (ultravioleta, azul y verde), y por lo tanto el potencial de la visión de color tricromática.
Los fotorreceptores son las células en el ojo sensibles a la luz; eso significa que su visión del color puede ser tan buena como la de los seres humanos y los primates, y significativamente mejor que la de otros mamíferos tales como perros o gatos.
La mayoría de los mamíferos tienen sólo dos tipos de fotorreceptores que pueden utilizar para la visión del color, lo que supone una peor percepción del mismo.
Sin embargo, a diferencia de los humanos, las hormigas toro también pueden ver la luz ultravioleta.
El contexto más amplio de la investigación es averiguar cómo los animales ven su mundo; en el caso de las hormigas, a los investigadores le gustaría saber qué estrategias usan esos insectos para superar los efectos de la miniaturización como ojos pequeños y potencia de procesamiento muy limitada.
El interés en la miniaturización proviene tanto de la biología como de la robótica; encontrar cómo los animales navegan y ven su mundo con recursos muy limitados y utilizan los mismos para obtener el mejor resultado podría, a la larga, ayudar a los científicos a diseñar robots y vehículos más autónomos y efectivos.
Canberra, 20 mayo 2015
Crónica Digital/ PL