La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, sorprendió anoche a la opinión pública y a la clase política en general, al anunciar un cambio de gabinete en el curso de las próximas 72 horas.
Aunque desde hace semanas se especulaba con la posibilidad de una remoción de su consejo de ministros, la jefa de Estado dio a conocer la información durante una entrevista de televisión con el popular locutor Mario Kreutzberger (Don Francisco).
“Yo hace algunas horas le pedí la renuncia a todos los ministros y me voy a dar 72 horas para tomar la decisión sobre quiénes se quedan y quienes se van”, remarcó.
La primera interrogante en medio de numerosas declaraciones de todos los partidos políticos y parlamentarios a la radio y televisión chilenas, apuntó hacia el canciller Heraldo Muñoz, por las funciones que adelante en estos momentos.
Muñoz es el jefe de la delegación de Chile en los alegatos que tiene lugar en La Haya, Holanda, ante la Corte Internacional de Justicia en razón de la demanda de Bolivia por una salida soberana al Océano Pacífico.
Sin embargo, fuentes oficiosas señalaron que el jefe de la diplomacia del país austral fue de hecho ratificado en su cargo, algo que no confirmó el Palacio de La Moneda.
Bachelet dijo en la entrevista de Canal 13 en el programa ¿Qué le pasa a Chile?, que no tomó esta decisión antes porque los acontecimientos en el país necesitaban a los ministros trabajando en terreno.
La dignataria, con una baja cota de popularidad en estos momentos, reveló que el momento más duro en un año de mandato fue el caso que involucró a su hijo y a su nuera, “por el caso mismo, y porque la gente no me creyó (…)”.
Se refería de esa forma al expediente Caval, un negocio inmobiliario en el cual se investiga aún a su hijo mayor por presunto tráfico de influencias y además conflicto de intereses.
Santiago de Chile, 7 de mayo 2015
Crónica Digital / PL