Especialistas franceses consideran hoy contraproducente y desproporcionada la decisión de suspender los vuelos a varios países de África Occidental afectados por el ébola, una epidemia que ya ocasionó la muerte a unas mil 600 personas.
Sylvain Baize, responsable del Centro Nacional de Fiebres Hemorrágicas Virales de la ciudad de Lyon, expresó que, con las medidas de control de los pasajeros, no hay ninguna razón para detener el servicio hacia Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakry.
“Yo tengo grandes reservas sobre la suspensión de los viajes”, dijo Baize, y precisó que ello desestabiliza por completo la lucha contra el mal, toda vez que impide la rotación del personal de salud y la llegada de recursos médicos hacia las zonas afectadas.
Durante los últimos días varias aerolíneas, entre ellas Air France, cancelaron sus operaciones a las naciones azotadas por el nuevo brote de ébola, detectado en marzo pasado.
Interrogado sobre el riesgo de que el virus sea importado a Europa, el responsable del centro de investigaciones de Lyon estimó posible la entrada de algún caso, aunque la probabilidad es baja.
Con esta opinión coincide Claire Magone, de la organización Médicos Sin Fronteras en Sierra Leona, y añade que si el virus entrara en Francia la posibilidad de una epidemia sería nula.
Magone califica como contraproducente, desproporcionada y un contrasentido a nivel de salud pública, la suspensión de los nexos aéreos con los países concernidos.
A corto plazo, el único medio de parar la propagación del virus es implantar centros de aislamiento y tratamiento para los pacientes, pero carecemos de ese tipo de estructuras, añadió.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el brote en África Occidental ha infectado a más de tres mil personas y los países con mayor número de casos son Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry, aunque también se registraron algunos enfermos en Nigeria y uno en Senegal.
La directora de la OMS, Margaret Chan, llamó a la comunidad internacional a redoblar los esfuerzos ante esta epidemia, que representa un reto no sólo para África, sino también para todo el mundo.
Chan instó a no bloquear los accesos, ni los medios de transporte a los países afectados porque eso demora la ayuda a los enfermos.
Paris, 3 de septiembre 2014
Crónica Digital / PL