El tercer paquete de sanciones contra Rusia impuesto por la Unión Europea (UE) entró hoy en vigor con medidas punitivas extensivas a varios bancos, compañías y políticos de este país, en consonancia con la política de Estados Unidos.
Las restricciones fueron aplicadas a un grupo de entidades financiero-crediticias de peso en el sistema bancario ruso como el Sberbank (Banco de Ahorro), VTB (Banco de Comercio Exterior), Rosseljozbank (Banco Agrícola), VEB (Banco Económico Exterior), GazpromBank, el Banco de Moscú y Banco Nacional de Comercio.
Aparecen también el consorcio Almaz-Antei y la Corporación Unida de Construcción Naval, del complejo militar industrial y la compañía de aviación Dobrolet. Estados Unidos anunció el martes reciente restricciones a un grupo de bancos y al sector petrolero ruso.
En total han sido castigados 95 ciudadanos rusos, entre políticos, empresarios y hasta periodistas, unidos a 25 entidades jurídicas (compañías, bancos y organizaciones comerciales).
El nuevo paquete europeo incluye la prohibición de exportación a Rusia de mercancías de doble uso y militar, tecnologías y equipos para el sector petrolero, destinados principalmente a la perforación y extracción en aguas profundas y en la plataforma continental en el Artico.
Las llamadas sanciones sectoriales tienen el fin de golpear el financiamiento externo a la economía rusa y frenar el desarrollo de esferas importantes en el crecimiento económico como la petrolera, coincidieron expertos aquí.
Según la publicación comunitaria, las medidas punitivas afectan en principio a las entidades registradas fuera de la Unión, con más del 50 por ciento del capital perteneciente a quienes figuran en la lista negra.
El representante de Rusia ante la UE, Vladimir Chizhov, lamentó que ese sea el camino escogido por Occidente para solucionar la crisis ucraniana.
Ante la crisis actual se impone aunar los esfuerzos de la comunidad internacional y en primer término de Rusia y de la UE, y otras partes interesadas para distender la situación y no “ocuparse de esas cosas”, declaró Chizhov a la agencia Interfax.
La Cancillería advirtió, por su parte, que las nuevas sanciones contradicen las reglas de la Organización Mundial de Comercio y acarrearán consecuencias negativas a los miembros comunitarios.
En coincidencia con esas medidas, las entidades sanitarias de control sobre los alimentos importados Rosseljoznadzor y Rospotrebnadzor anunciaron la prohibición al ingreso de algunos productos procedentes de Ucrania, Moldova y de la Unión Europea.
Se impuso la veda a la entrada al mercado ruso para semillas de girasol, harina de maíz, soya, leche y productos lácteos, vegetales, frutas y pescados en conservas, provenientes de Ucrania.
Desde hoy Polonia no podrá tampoco exportar hacia Rusia frutas y verduras debido al uso de fertilizantes y pesticidas nocivos, según los organismos reguladores locales.
El titular de Rosseljoznadzor, Serguei Dankvert, comentó a la agencia ITAR-TASS que la entidad reúne todas las evidencias de los casos relacionados con producción europea importada sujeta a cuarentana, a fin de evaluar los riesgos para Rusia.
Solo el volumen exportado al mercado ruso de frutas y vegetales procedente de Europa representa casi dos mil 500 millones de dólares anuales.
Según el Servicio Federal de Aduanas, la UE exportó a Rusia en 2013 vegetales por un monto de unos 935 millones de dólares, y de frutas, unos 1,52 mil millones de dólares.
Moscú, 1 de agosto 2014
Crónica Digital / pl