La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), cuya sede en Washington es cuestionada por varios gobiernos del área, podría sesionar en otros países, aseguró hoy aquí el vicecanciller chileno, Edgardo Riveros.
El funcionario dijo que el tema fue abordado en la reunión ordinaria de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que comenzó este jueves en Puerto Ayora, capital de una de las islas que forman el archipiélago ecuatoriano de Galápagos.
El cambio de sede ha sido debatido, y lo concreto es que la institucionalidad que tenemos permite que la CIDH pueda sesionar en diversos países, como hace la Corte Interamericana de Derechos Humanos, aseguró el funcionario chileno al término de la sesión.
Ecuador, Bolivia y Uruguay consideran que el fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos pasa inexorablemente por trasladar la sede de esa entidad de Estados Unidos, uno de los países que no ha ratificado el Pacto de San José.
Al respecto, el subsecretario de Relaciones Exteriores de Chile dijo que los representantes de los 12 países miembros de la Unasur coincidieron también en que es necesario comprometer al mayor número de Estados en la universalidad e institucionalidad de los derechos humanos.
Para mañana, último día de la reunión, está previsto que se aborde la puesta en marcha del Banco del Sur, el papel mediador del bloque regional en los diálogos de paz en Venezuela, cuyo canciller, Elías Jaua, dijo que denunciará la injerencia de Estados Unidos en su país.
El jefe de la diplomacia ecuatoriana también anunció que formalizará ante sus colegas de la Unasur la solicitud hecha por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de convocar a una cumbre de los jefes de Estado para tratar la situación en esa nación, y la intromisión estadounidense.
Islas Galápagos, Ecuador, 23 mayo 2014
Crónica Digital / PL