Los economistas Fernando Carmona y Felipe Correa comentan lo que será la Segunda Mesa de Conversación Laboral, hoy desde las 18:30 horas en la CUT, en la que se analizará la realidad de las cifras de desempleo.
Fernando Carmona, Economista de la Universidad de Concepción y Encargado del Área de Investigación de la Fundación Instituto de Estudios Laboral- organizadora de las mesas- explica que “la tasa de desempleo de América Latina y el Caribe en 2012 fue la más baja de las últimas décadas, tras descender al 6,4%, del 6,7% que registró el año anterior. Esta cifra es especialmente relevante a la luz de la difícil situación que impera en los mercados de trabajo de otras regiones del mundo. Para Chile el año 2013 estuvo marcado por cifras de desempleo históricas 5,7%, las más bajas de los últimos diez años”
Carmona detalla que “los indicadores laborales mejoraron pese al modesto crecimiento de la economía regional, de apenas un 4,0%. A pesar de un marcado aumento de la participación laboral, el número de desempleados bajó aproximadamente a 549.000 personas a nivel pais, gracias a una generación de empleo relativamente fuerte. Sin embargo, aún la tasa de participación de las mujeres es demasiado baja comparada con la de los hombres”.
A juicio del economista de FIEL, “si bien esta situación tiene varios efectos laborales y distributivos positivos, su sostenibilidad es motivo de preocupación en un contexto en que la inversión —aun con algunos avances recientes— se mantiene a niveles relativamente bajos y con una composición que no favorece la diversificación productiva. Hay dudas sobre el futuro dinamismo de la capacidad productiva, ya que el país enfrenta enormes retos en términos de innovación, calidad de la educación, infraestructura y productividad”
“La OIT ha venido insistiendo desde hace tiempo en que no basta con la generación de empleo de cualquier tipo y por ello ha propuesto el concepto del trabajo decente, para subrayar que se requieren empleos de calidad donde se respeten los derechos fundamentales en el trabajo” recuerda Carmona.
Agregó Carmona que “saber hoy cual es calidad de los empleos que hemos ido creando, nos puede dar respuestas acerca del derrotero de nuestra economía y los potenciales problemas no resueltos por el actual modelo económico, los trabajadores necesitan saber a qué se enfrentan detrás de estas cifras” históricas.
En tanto, Felipe Correa, Economista de la Universidad de Chile y del Grupo Nueva Economía, agregó que “en una sociedad cada vez más globalizada, donde las crisis que suceden en otros continentes dejan ver sus consecuencias en nuestra pequeña economía, entender las dinámicas del empleo y el desempleo es fundamental para proyectar y anticipar escenarios, y para orientar los objetivos de acción política a las áreas prioritarias”.
“Primero está el hecho de entender el empleo como un derecho fundamental, sin el cuál la subsistencia y el desarrollo de las capacidades humanas se ven brutalmente reducidas. Y esto no es trivial en el sentido de que en Chile se han visto patrones cíclicos del desempleo que van muy relacionados a los distintos proyectos políticos que en Chile conviven, y que en uno u otro periodo conducen la política económica del país” concretó.
En segundo lugar, agregó Correa “es cómo entendemos el empleo como una actividad que contribuya a la liberación de la persona en todos los sentidos, y no como necesariamente como una obligación y algo necesario que nos provee de ingresos suficientes para vivir. Esta discusión hoy día no se da, porque todos dan por asumido que el trabajador es solo un insumo necesario de la producción”
El investigador del grupo Nueva Economía agregó que “cuando tomamos al trabajador como sujeto y no objeto de la dinámica económica, las cosas empiezan a verse distintas. Por ejemplo, ¿qué tanto sirven las reivindicaciones salariales, si un aumento en el salario se destina a consumir cosas que no necesitamos, pero que la sociedad nos “impone” que necesitamos? ¿No sería mejor plantearse la necesidad de, en vez de demandar mayores ingresos y por lo tanto más consumo, demandar un menor tiempo de trabajo, con el objetivo de tener más tiempo libre, para estar con la familia o para desarrollarse en otros aspectos”
“Hoy en Chile las riquezas están demasiado concentradas en muy pocas manos, pero si ocurriera una buena redistribución hacia los trabajadores, sería posible pensar en aumentar los ingresos de las mayorías, reduciendo al mismo tiempo la carga de trabajo. Todo esto se relaciona con el tema del empleo, y es importante conversar estos temas, sobre todo ahora que se abren nuevas oportunidades para cambiar muchas cosas que en Chile andan mal”
Santiago de Chile, 3 de abril 2014
Crónica Digital