Presidenta regional del Magisterio adelanta “disposición al diálogo y si es necesario presión social” para hacer efectivas las reformas comprometidas por la nueva administración.
La presidenta del Regional Bío Bío del Colegio de Profesores, Olimpia Riveros, señaló que el Magisterio penquista estará atento al cumplimiento de los diversos anuncios en materia de educación contemplados por el programa de la administración Bachelet, y adelantó que no descarta movilizaciones para empujar la concreción de esas reformas.
La dirigenta expresó que la tradicional ceremonia de inauguración del año escolar 2014 del Magisterio se realizará una vez asuman las nuevas autoridades de educación en el nivel, al tiempo que indicó que la directiva gremial que preside no comparte el financiamiento de la nueva infraestructura del liceo Mariano Latorre, de Curanilahue, solventada en parte por la Minera Escondida, empresa que aportó 9 mil millones de pesos a la refacción del establecimiento, en tanto que el MINEDUC destinó mil millones. En opinión de la docente, la fórmula “desperfila, una vez más, el rol responsable que el Estado debe tener en materia de educación”.
La dirigenta también se refirió a la negativa evaluación del gremio docente a lo que fue la política educacional de la administración saliente: “no decimos que el gobierno que se va sea el único responsable del progresivo deterioro educativo y del avance del modelo neoliberal, pero sí afirmamos que en este período las condiciones de enseñanza se precarizaron significativamente para el profesorado.” Riveros explicó que “la guinda de la torta” de esa precarización fue la Ley 20.501, que ha consagrado el empleo precario docente en términos nunca antes vistos en Chile”.
Al respecto, la dirigenta adelantó que el Magisterio acordó “luchar por la derogación de esta ley, como también de bajar la Superintendencia de Educación y la Agencia de Calidad”, entidades que, en su opinión, “no han contribuido al profesorado a mejorar el ejercicio de su labor, sino que más bien han operado como mecanismos de control”.
Por todo lo anterior, Riveros señaló que el Colegio de Profesores hará “todo lo que esté a su alcance” para que las propuestas de cambios en educación señalados en el programa de la nueva administración “se lleguen efectivamente a cumplir”, y adelantó que el Magisterio tendrá una disposición al diálogo y a la convergencia, sin descartar la presión social “si esta llega a ser necesaria para avanzar”
Santiago de Chile, 13 de marzo 2014
Crónica Digital / Agencias
