A 40 años del golpe Cívico–Militar en nuestro país, hemos visto y escuchado la permanente política del empate, que por más de 23 años han querido convencernos que todos fuimos responsables del terrorismo de Estado que se instauró por más de 17 años.
Hoy, a días de la conmemoración del bombardeo a La Moneda, y del asesinato de miles de personas, hay dirigentes de la derecha que piden perdón, otros como Emilio Cheyre trata de victimizarse, ante un hijo que sufrió el asesinato de sus padres, por parte del Ejército del que era parte.
Lo más insólito y ante tanta impunidad existente en nuestra patria, el presidente Sebastián Piñera, decide conmemorar el 11 de septiembre, haciendo una crítica a todos los sectores, víctimas y victimarios por igual. Lo que es intolerable.
Es posible que la falta de verdad en el país siga rondando la impunidad, que los victimarios o cómplices civiles que fueron parte de la cultura de la muerte hacia los dirigentes políticos y sociales, campesinos, sigan impunes y no entreguen la verdad de los responsables de tanta tragedia cometida en contra del pueblo chileno.
Ante esto, la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, exigimos al presidente Piñera, hechos concretos con la deuda de las víctimas de las violaciones a los derechos humanos.
Por tanto, no aceptamos conceptos como los emitidos por el presidente que dice que hubo “cómplices pasivos de las violaciones a los DD.HH”. En Chile hubo quienes ejecutaron por acción u omisión las aberraciones de las que dan cuentas las investigaciones.
Hoy, un protector pasivo de la impunidad es el subsecretario de interior Rodrigo Ubilla, quien mediante su inercia cómplice no firma las decenas de querellas que están en su poder desde el año 2012, entre ella la ejecución de seis militante comunistas el 11 de septiembre de 1973 por el Ejército en el sector de Las Coimas en san Felipe.
Denunciamos que esta querella fue presentada el 17 de julio de 2012, y Ubilla no la acoge, como una decena que tiene en su poder.
Exigimos hechos concretos no palabras vacías. Esto también es ser cómplice pasivo de aquellos crímenes que se mantienen en la impunidad. Y Piñera sabe que esos cómplices pasivos están hoy en La Moneda.
Queremos señalar a la opinión publica nacional e internacional, que ante esta falta de voluntad política de este gobierno, nos vemos en la necesidad de ocupar las dependencias del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior nuevamente, ante la impotencia de ver como fallecen los familiares, testigos y los victimarios, por lo que los crímenes cometidos quedan en la absoluta impunidad.
Exigimos con fecha de hoy al subsecretario Rodrigo Ubilla, cómplice pasivo, que firme las querellas que le fueron entregadas por los abogados del programa.
Porque queremos que se investiguen los crímenes, porque queremos la verdad y la justicia que por mas 4 décadas las victimas esperan, sus familiares esperan y luchan por ello por eso estamos acá nuevamente denunciando y exigiendo.
VERDAD, JUSTICIA Y MEMORIA
Santiago de Chile, 3 de septiembre 2013
Crónica Digital