La Corte Suprema de Chile aprobó por unanimidad la extradición a Argentina de Otilio Romano, exjuez destituido en la vecina nación por encubrir un centenar de casos de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura militar (1976-1983).
El máximo tribunal dio luz verde a la resolución del ministro instructor Sergio Muñoz, quien había dictaminado el envío de Romano de vuelta a su país, para que responda ante la justicia por el amparo de delitos de lesa humanidad.
Según un comunicado del Poder Judicial, la decisión fue adoptada por los cuatro jueces de la Segunda Sala de la Corte Suprema.
El texto precisa que la extradición es otorgada ya que, en correspondencia con el Código Penal Argentino, Romano amparó 34 delitos de privación ilegítima de libertad, con desaparición forzada de personas; 26 delitos de privaciones ilegítimas de libertad; 36 delitos de tortura, un delito deallanamiento ilegal y un delito de denegación de justicia.
En mayo de 2012 el gobierno chileno rechazó la solicitud de refugio político que le hiciera el exjuez Romano, por lo que perdió la visa que le permitía permanecer en Chile y quedó sujeto a la decisión de la Corte Suprema, que tenía pendiente pronunciarse sobre la solicitud de extradición presentada por Argentina.
Prófugo de la justicia en la nación trasandina, huyó a Chile en agosto de 2011, donde solicitó refugio político y consiguió un visado de permanencia por ocho meses. Desde su ingreso en territorio chileno, organizaciones defensoras de los derechos humanos en esta capital exigieron a la administración de Sebastián Piñera su expulsión.
Alegaron su pasado como represor y su expediente criminal en el que se le imputa haber cerrado la causa de un detenido desaparecido para quedarse con su hija.
Santiago de Chile, 22 de agosto 2013
Crónica Digital