El primer ministro ruso, Dmitri Medevedev, ordenó crear una comisión gubernamental para determinar las causas de la caída hoy de un cohete impulsor Protón-M con tres satélites del sistema de navegación Glonass.
Medvedev demandó una lista de las personas responsables de esa misión fracasada, incluidos jefes de alta jerarquía de la empresa Roscosmos, confirmó la portavoz del Ejecutivo, Natalia Timakova.
Los detalles del accidente ocurrido al minuto del lanzamiento del cohete impulsor desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajstán, fueron explicados a Medvedev por el viceprimer ministro Dmitry Rogozin, a cargo de la modernización del sistema defensivo ruso.
Además de delimitar causas y responsabilidades, Rogozin y sus asistentes deberán elaborar una relación de medidas en el campo aeroespacial para prevenir desastres similares en el futuro.
Unos 10 segundos después de iniciado el despegue, el Protón-M cambió la trayectoria de vuelo y comenzó a descender hasta estrellarse en el territorio de la base de disparo, según fuentes de la agencia federal Roscosmos.
El reporte preliminar atribuye el accidente a problemas técnicos en la instalación del cohete o algún fallo en el motor. Otras versiones, reflejadas por la agencia Interfax, indicaron la posibilidad de que el misil haya perdido estabilidad, o fallado el sistema de dirección.
La caída del cohete pudo haber esparcido en la zona hasta 500 toneladas de combustible heptilo, una de las sustancias de mayor contenido tóxico, alertaron autoridades del cosmódromo kazajo. Sin embargo, no se reportaron víctimas ni lesionados.
En cuanto a los costos, se evalúan en alrededor de los 200 millones de dólares, casi el costo de los ingenios espaciales, comentaron las agencias rusas.
Con este accidente, ya son tres los ocurridos en la industria espacial rusa en lo que va de año, el anterior sucedió en febrero cuando cayó el cohete portador Zenit-3SL.
Reiterados fracasos del sector provocaron que a fines de noviembre Medevedev encabezara una conferencia con funcionarios de alta jerarquía y especialistas para debatir los problemas de la industria coheteril espacial.
De manera coincidente con la reunión, fue relevado Yuri Urlichich de su responsabilidad como diseñador general del sistema de navegación global satelital Glonass (proyecto ruso similar al GPS estadounidense y al Galileo de la Unión Europea).
Urlichich presentó también su renuncia como director general de la corporación Sistemas Espaciales rusos (OAO).
Unos seis mil 500 millones de rublos (más de 217 millones de dólares al cambio actual) fueron desviados durante el desarrollo del Glonass, según los investigadores.
Esa cifra equivale a un tercio del costo de la dotación de satélites operativos del proyecto en la actualidad.
Moscú, 2 de julio 2013
Prensa Latina