El rostro humano apareció hace un millón de años, según evidencia la reconstrucción facial de un Homo Antecessor hecha por científicos españoles y estadounidenses.
Investigadores del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (CENIEH) y la Universidad de Nueva York, reprodujeron cómo sería el rostro de un adolescente primitivo conocido como Chico de la Gran Dolina si hubiese seguido creciendo.
Explican los expertos en la revista estadounidense PLoS One, que el estudio se apoya en los cambios experimentados por el hueso en su desarrollo lo que deja huellas en cada elemento óseo.
Los antropólogos compararon los restos del joven Homo Antecessor, que vivió en la Sierra de Atapuerca con los de un Homo Ergaster, encontrado en Marruecos, que tenía la misma edad dental.
De esa forma comprobaron que este individuo tenía rasgos más primitivos, una menor reabsorción facial, una dentadura menos evolucionada y una capacidad craneal menor que la del Chico de la Gran Dolina.
La osamenta del adolescente muerto hace un millón de años es una de las identificadas en el nivel TD6 de la Gran Dolina donde se han encontrado, hasta ahora, 140 fósiles de homínidos desde 1994.
Washington, 11 junio 2013
PL