En días recientes, en declaraciones a Radio Cooperativa, Marcel Claude, candidato en las próximas elecciones presidenciales, efectuó una inaceptable
Habiéndosele manifestado a través de las redes sociales el rechazo a estas insólitas declaraciones, habiendo transcurrido un plazo más que prudente y al no existir a la fecha aclaración o retractación alguna, nos sentimos en el deber de salir al paso de esta verdadera agresión injustificada.
Las organizaciones ecologistas, como parte de los movimientos sociales, venimos luchando hace muchos años por la defensa de la vida, los derechos ciudadanos, la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos y terrestres, tanto a nivel nacional como internacional. En esta lucha nos hemos articulado con las comunidades locales y pueblos originarios a lo largo de todo nuestro territorio, vinculando las reivindicaciones ambientales con un proyecto de nueva sociedad, donde la valorización, el respeto y la defensa de la Naturaleza ocupan un lugar central.
Este accionar nos ha significado el constante asedio y descalificaciones de los defensores del sistema extractivista e industrialista neoliberal, siendo motejados de “hippies trasnochados”, “ecoterroristas”, “radicales fundamentalistas”, y otras caricaturas que demuestran el temor ante un mensaje y accionar ciudadano, que cada vez tiene una mayor recepción en nuestra sociedad, especialmente en los jóvenes y comunidades locales.
Durante las dos décadas de postdictadura binominal, mal llamada “democracia”, las organizaciones ecologistas buscamos movilizar a la ciudadanía, activa y propositivamente, contra la depredación de nuestros territorios y el robo de los bienes comunes del país. Entre los ejemplos más reciente de ello está la fulminante reacción contra la aprobación de la Termoeléctrica Barrancones, que le propinó el 2010 la primera gran derrota al actual Gobierno y que demostró que la lucha y movilización ciudadana podían vencer. El año 2011, las grandes movilizaciones contra Hidroaysén, abrieron las Alamedas por las cuales fluiría luego el potente movimiento estudiantil. El 2012 se levanta una amplia alianza contra la privatización del patrimonio pesquero del país, unida a la esperanzadora y exitosa lucha de las comunidades locales y organizaciones ciudadanas contra los megaproyectos mineros y energéticos depredadores. Pensamos que todo ello termina de desmentir las acusaciones del Sr. Claude de ser funcionales a los intereses y visiones de “derecha”.
A nuestro juicio, Marcel Claude debiese ser cuidadoso a la hora de hablar sobre funcionalidad a los intereses de la derecha. En el año 1983, la ciudadanía chilena comenzaba a levantarse masivamente contra la dictadura cívico-militar. Los estudiantes recuperaban los Centros de Alumnos y Federaciones, saliendo a la calle a luchar por la democracia y la defensa de la vida. Por su parte, los pobladores se movilizaban valientemente, tomándose terrenos para exigir una solución a su necesidad de un hogar propio, enfrentándose resueltamente a la represión. Los trabajadores reorganizaban sindicatos, se lanzaban a huelgas y convocaban las primeras jornadas de protesta nacional, de las cuales se están cumpliendo justamente 30 años. A su vez, gracias a la solidaridad internacional, se creaban ONGs, que brindaban el valioso apoyo de profesionales a la lucha por la libertad y la democracia. Precisamente en ese marco de eclosión de la gesta democratizadora del pueblo chileno, la que fue sangrientamente reprimida, el Sr. Claude, ya graduado de ingeniero comercial, prefiere optar por ingresar a colaborar con las autoridades de la dictadura en el Banco Central, dirigido a la fecha por Carlos Cáceres, uno de los civiles más cercanos a Pinochet.
Todo el mundo tiene derecho a cambiar. Valoramos este hecho. Sin embargo, es bueno hacerlo conservando una dosis de pudor respecto de la propia historia y de respeto por los que vienen luchando desde hace mucho tiempo.
Luis Mariano Rendón E
Coordinador
Agrupación “Acción Ecológica”
Juan Carlos Cárdenas N.
Director
Centro Ecoceanos
Santiago de Chile, 30 de mayo 2013
Crónica Digital