Están a la vuelta de la esquina, en su propia calle, en la vecindad. Por donde se alza un templo de la iglesia católica, casi siempre majestuoso, hay dos o tres más modestos, ya sea en Sao Paulo, La Habana, Caracas o San Salvador.
Se ocupan de lo humano y lo divino. Hacen de la fe un ejercicio con alta carga social, léase enfrentar la delincuencia juvenil, el embarazo precoz y no deseado, la drogadicción y otros flagelos de las sociedades latinoamericanas.
Son las iglesias cristianas: bautistas, metodistas, anglicanas, pentecostales, moravas, menonitas, entre otras, así como asociaciones cristianas que conforman el Consejo Latinoamericano de Iglesias (CLAI), cuya VI Asamblea General se realizó en La Habana entre el 22 y el 26 de mayo.
A Cuba le fue otorgada la sede en 2011, pero la fecha original caducó hace meses producto de las leyes punitivas del bloqueo que Estados Unidos ejerce contra la mayor de las Antillas desde hace más de cinco décadas.
El Departamento del Tesoro mantenía congelados los fondos con que se financiaría este encuentro continental en La Habana, una muestra de que el bloqueo afecta no solo a los cubanos, creyentes o no, sino también a otros pueblos de la región.
“Con bloqueo o sin bloqueo hicimos nuestra Asamblea en Cuba, exclamó el obispo Julio Murray, quien encabezó el foro en su calidad de presidente de la Junta Directiva del CLAI durante los últimos seis años.
En declaraciones exclusivas para Prensa Latina, Murray encomió el trabajo de las iglesias cubanas y la colaboración de diversas instituciones locales para el éxito del evento.
“Las tareas, acompañamientos y gestos concretos del pueblo cubano, sus iglesias e instancias fueron muchos y diversos desde que la Junta Directiva eligió a La Habana como sede de la VI Asamblea”, agregó el prelado panameño.
No reparó en elogios para artesanos del programa religioso Cairos, de la provincia de Matanzas que hicieron un donativo al evento. “Es una cruz muy original, inédita, que recopila detalles de distintos lugares. Una cruz de dos lados, al frente representa el día y las actividades del pueblo de esta isla, su reverso, muestra la noche cubana”.
CARTA PASTORAL DE LA HABANA
La VI Asamblea General del CLAI adoptó la Carta Pastoral de La Habana y eligió a su nueva Junta Directiva, que ahora preside el pastor argentino Felipe Adolf.
Adolf, pastor luterano que oficia en Ecuador, dijo que la reunión “resultó fundamental porque nos da mandatos muy claros para trabajar con las iglesias y su incidencia en la sociedad”.
Explicó que la Asamblea General del CLAI se reúne cada seis años para evaluar el trabajo y proyectarse al futuro. “En esos lapsos cambian las coyunturas”, indicó.
“Ahora, por ejemplo, tenemos las pláticas en Cuba para la paz en Colombia y tenemos la esperanza cierta de que pare la guerra”.
“Para el CLAI era muy importante reunirse en Cuba, que padece el bloqueo, y queríamos tener el gesto concreto de venir a expresar nuestra solidaridad”, enfatizó. No en balde el lema central del encuentro resultó “Por un ecumenismo de gestos concretos”.
En la nueva Junta Directiva del CLAI fueron electos representantes regionales de Puerto Rico, Cuba, Nicaragua, Honduras, Argentina, Paraguay, Brasil, Costa Rica y Panamá.
La Carta Pastoral de La Habana fija posiciones sobre temas de actualidad como la condena del bloqueo a Cuba, así como el rechazo a las detenciones ilegales y la práctica de torturas en la base que Estados Unidos mantiene en Guantánamo.
Subraya el apoyo a los procesos integracionistas en América Latina, expresados en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Unión de Naciones Suramericanas.
Critica la “mercantilización de la naturaleza por las transnacionales y condena la “interferencia por parte de los medios de comunicación y el capital internacional” en la profundización del proceso democrático del pueblo venezolano.
Clama por la autodeterminación del pueblo boricua y la liberación del luchador independentista Oscar López Rivera, así como por negociaciones entre Gran Bretaña y Argentina sobre la soberanía de las Malvinas, entre otros temas.
“Hemos cubierto toda las expectativas que se tenían y se han superado porque salimos de La Habana con una carta pastoral que nos da la oportunidad de identificar gestos concretos de unidad hacia las iglesias y hacia América Latina y el Caribe”, concluyó Murray.
SOLIDARIDAD CON LOS CINCO
Durante una de sus sesiones, que transcurrieron en el hotel Habana Libre de esta capital, la Asamblea del CLAI realizó un fraternal acto de solidaridad con cinco cubanos condenados en Estados Unidos por enfrentar planes terroristas contra Cuba.
Son ellos Gerardo Hernández, Fernando González, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y René González, este último ya en Cuba tras cumplir 13 años de cárcel.
A René le fue impuesta la Cruz de la Solidaridad, y recibió de manos de Joel Ortega Dopico, presidente del Consejo de Iglesias de Cuba, una Biblia, ”el libro que habla de la libertad y la vida”, al decir del pastor presbiteriano.
Por su parte el doctor Reinerio Arce, rector del Seminario Evangélico de Teología de Matanzas, recordó que la Plataforma Pastoral Cubana trabaja por la reunificación familiar de quienes son conocidos internacionalmente como Los Cinco.
Destacó el respaldo ofrecido a esta causa por el Consejo de Iglesias de Estados Unidos, y señaló que, como dice la Biblia, la verdad los hará libres.
René González rindió tributo a sus cuatro camaradas que siguen encarcelados y aseguró que “no lo merecen, porque estaban defendiendo lo más sagrado para toda religión que es la vida”. Insistió en multiplicar los esfuerzos por el regreso de Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio.
La VI Asamblea del CLAI deja un mandato para el nuevo período. Una iglesia comprometida por la vida e incidencia pública ha de marchar con los más necesitados.
Como dijera una delegada centroamericana: “salimos de La Habana con el convencimiento de haber hecho las tareas; el señor nos ha dado nuevas energías, pero también compromisos y retos”.
Por Orlando Oramas León* Periodista de la Redacción Nacional de Prensa Latina
La Habana, 28 de mayo 2013
Prensa Latina