Washington. El presidente estadounidense, Barack Obama, atenazado por investigaciones y escándalos que ensombrecen su administración en este segundo mandato, pronunciará hoy un discurso con énfasis en el muy socorrido tema de la lucha contra el terrorismo.
Obama tiene previsto hablar en la Universidad de Defensa Nacional sobre la evolución de las políticas antiterroristas, el controvertido uso de aviones no tripulados y los planes renovados de cerrar el centro de detención en la base naval enclavada en Guantánamo, territorio ocupado en el sureste de Cuba, informó a la prensa un funcionario de la Casa Blanca.
Las palabras del mandatario llegan en medio del escrutinio a que es sometido después de los bombazos del 15 de abril en el maratón de Boston que causaron 13 muertes.
También está el inconveniente de una prolongada huelga de hambre de un centenar de reclusos en el penal de Guantánamo, que protestan contra la violación de sus derechos humanos, además de la incómoda situación creada por la filtración de que el gobierno registró en secreto llamadas y teléfonos de periodistas de la agencia The Associated Press (AP).
A estas adversidades para la Casa Blanca se suman las investigaciones por el desmedido escrutinio del Servicio de Rentas Internas a grupos que tienen una postura contraria a la agenda demócrata.
El gobernante hará énfasis en las “amenazas” y los “nuevos peligros” que tiene Estados Unidos ante sí, destacó el domingo un artículo del periódico The Washington Post al anunciar la próxima comparecencia de Obama.
En su discurso sobre el Estado de la Unión, en enero último, el presidente estableció el compromiso de hacer más transparente la llamada lucha antiterrorista y sus palabras del jueves serán “el primer paso” en ese sentido, acotó al Post un funcionario no identificado.
Recordó el rotativo que Obama tenía previsto hacer esta intervención a inicios de mayo, la que aplazó debido al ayuno en Guantánamo y luego de la reciente revelación del espionaje telefónico a la AP.
La huelga de hambre que comenzaron el 6 de febrero más de un centenar de los 166 presos confinados en Guantánamo abre numerosas interrogantes sobre los abusos que cometen allí los militares, advirtió el The Washington Post.
Obama prometió clausurar esa cárcel — considerada por activistas y defensores de los derechos humanos como un agujero negro en esa materia– en el primer año de su llegada a la Casa Blanca en enero de 2009.
El fin de semana pasado se cumplieron 100 días del inicio del ayuno y las autoridades de la prisión revelaron que se produjeron varias “alertas amarillas” o estados de emergencia médica temporales, debido al deterioro de algunos huelguistas.
De acuerdo con partes oficiales 30 de los 100 internos que protestan son alimentados a la fuerza.
Un reciente comentario de la cadena televisiva CNN señaló que si bien la auto-inanición es insoportable, constituye la única forma en que estos hombres “le han podido decir al mundo lo que significa ser injustamente detenido sin cargos ni juicio durante más de 11 años y que no haya un final a la vista”.
Santiago de Chile 23 de mayo 2013
Crónica Digital