El presidente de Siria, Bashar Al Assad, presentó hoy una nueva iniciativa para lograr la paz en el país, aunque desechó la posibilidad de dialogar con los grupos opositores armados a los cuales calificó de terroristas y traidores.
Durante un discurso de casi una hora en la sede de la Ôpera en esta capital, el mandatario delineó los aspectos para alcanzar un acuerdo político que ponga fin a los 21 meses de conflicto, el cual ha segado la vida a alrededor de 60 mil personas.
Al Assad remarcó que el requisito fundamental para abrir las puertas al diálogo es que potencias occidentales cancelen el suministro de armas a los insurgentes.
Luego, enfatizó, el Ejército Árabe Sirio detendrá sus operaciones y se iniciará un diálogo nacional enfocado en la elaboración de una nueva Constitución y la elección de un gobierno.
El Gobierno fomentará un diálogo nacional con todas las fuerzas, internas y externas, para convocar una conferencia de la que salga otra Carta Magna, que será sometida a referendo, se harán elecciones para escoger un nuevo Gobierno y se decretará una amnistía general, afirmó el gobernante.
Calificó a los grupos de irregulares de terroristas y traidores que buscan destruir la infraestructura de la nación, gracias al apoyo de naciones extranjeras.
En este sentido consideró legítimo defender el territorio nacional, pues se está librando una guerra financiada por el exterior, lo que la convierte en una ocupación armada, remarcó.
Defender la patria es un deber indiscutible, legal, constitucional y legítimo, y constituye nuestra única opción, pues de lo contrario no habrá seguridad para ningún compatriota, aseveró.
Optar por una solución política al conflicto, algo por lo cual nos hemos esforzado desde los primeros días, no invalida nuestra decisión de defendernos de las agresiones, agregó.
Al Assad advirtió que el gobierno dialogará con todas las fuerzas, excepto con aquellas que se convirtieron en esclavos de designios foráneos.
Mantendremos un diálogo con cualquiera que discrepe de nuestros puntos de vista, siempre y cuando sus principios se basen en el patriotismo y no quieran vender el país a sus enemigos, advirtió.
Agradeció a Rusia, China e Irán, entre otros países, mantenerse firmes y luchar contra la injerencia y el complot orquestado por occidente y naciones árabes contra Siria, dijo.
Siria permanecerá libre y soberana, y no se someterá ni aceptará la tutela de ningún Estado, recalcó Al Assad.
El discurso del jefe de Estado fue transmitido en vivo por 110 canales de radio y televisión y fue seguido por unos 350 millones de televidentes en todo el mundo, destacó la agencia de noticias SANA.
Santiago de Chile 7 de Enero
Crónica Digital