“Queremos repudiar en forma categórica el acto del 10 de junio en homenaje a uno de los asesinos más grandes de nuestro país. No es posible que nuevamente un grupo de chilenos pretenda reírse del dolor de los familiares de las víctimas de la dictadura. Ya sabemos lo que ocurrió con el homenaje a Miguel Krassnoff, esperamos que este acto no se lleve a cabo por las graves consecuencias que podría traer”, afirmó Jiménez.
El parlamentario agregó que lo más sorprendente es que este homenaje sea organizado por otro asesino como lo es Corbalán, quien “tiene toda una red de empresarios, artistas y políticos que lo apoyan”. Creemos que toda esta operación de inteligencia no la realiza desde Punta Peuco, sino que desde el Hospital Militar”.
En ese sentido, Jiménez señaló que según información entregada por el Director de Gendarmería, el año 2010 Corbalán estuvo 108 días en el Hospital Militar, en el 2011 estuvo 72 días, y el 2012 ya van 28 días, en su mayoría por problemas odontológicos y oftalmológicos.
“Esta es una situación incomprensible, y que se explica por la mayor facilidad que existe en el Hospital Militar para recibir visitas”, agregando que la Comisión de DDHH pidió al Ministro de Defensa un registro con las visitas que recibe Corbalán en el centro hospitalario.
Por su parte, el diputado Sergio Aguiló señaló que las operaciones de inteligencia señaladas por Corbalán en un memorando, “lejos de ser bravuconadas de un demente, son operaciones en curso que tienen realidad efectiva en el país”.
“En la carta aparecen los ascensos y descensos de la planta funcionaria de Gendarmería, luego la operación política del 27F para neutralizar a Bachelet encabezada por el diputado Alberto Cardemil, situaciones que se han ido cumpliendo en el tiempo. Por eso nos preocupa que a pesar de la gravedad de los hechos, se haya producido un círculo de silencio en esta materia. Quizás mañana veamos cómo el poder de este tipo de gente excede a los poderes constitucionales de la República”, explicó.
Asimismo, Gabriel Silber indicó que “los hechos señalados en el memorando de alguna manera se van enhebrando y van cobrando cierta lógica y cierto contexto”.
El diputado Ramón Farías emplazó a los ministros de Defensa, de Justicia, y a los directores de Gendarmería y del Hospital Militar a dar una explicación al país respecto a lo que está sucediendo con Corbalán y con otros reos acusados de crímenes de lesa humanidad y gozan de ciertos privilegios.
“El gobierno mucho se ha llenado la boca con la puerta giratoria, con la lucha contra la delincuencia, y sin embargo, organismos que dependen del gobierno están avalando este tipo de actividades. No pueden haber presos de primera y segunda categoría”, indicó.
Finalmente, Accorsi sostuvo que “esta situación es una bofetada a las familias de detenidos desaparecidos, realmente es una vergüenza para nuestra institucionalidad. Yo quiero emplazar a la alianza que no han dicho nada respecto a este tema. Aquí se está transgrediendo la institucionalidad y es nuestro deber como fiscalizadores dar a conocer la verdad”.
Santiago de Chile, 25 de mayo 2012
Crónica Digital