Según informaciones de prensa, consejeros de la entidad empresarial que preside Bruno Philiphi expresaron que hay mucho populismo que desborda la autoridad presidencial y la debilita y también se mostraron preocupados por las reformas laborales que está impulsando el gobierno. También empresarios agrupados en la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), expresaron su inquietud por el enfoque al tema laboral dado por el Ejecutivo, que a su juicio tiende al conflicto.
Estamos en presencia de una campaña del terror por parte del empresariado. Siempre estos empresarios se asustan cuando se quiere buscar una legislación en donde haya más equidad en las relaciones laborales, dijo el senador Pedro Muñoz, presidente de la comisión de Trabajo del Senado.
Agregó que para el desarrollo del país tienen que existir reglas claras y las reglas claras se dan a través de unas acotadas normas laborales que impidan abuso y que le den tranquilidad a todos los sectores productivos del país. Todos saben la realidad en que laboran los trabajadores en Chile y la precariedad laboral en que se encuentran y así lo ha venido señalando claramente la propia Iglesia Católica. Como socialistas es nuestra obligación impulsar iniciativas a favor de los trabajadores. Nosotros nos debemos a la gente, al pueblo y por eso seguiremos enviando iniciativas para favorecer a los trabajadores.
Respecto a las críticas del empresariado de que son los parlamentarios los que están cogobernando frente a la debilidad de un gobierno que no ejerce autoridad, Muñoz dijo que se trata de una majadería más de ciertos sectores, especialmente de la derecha política que siempre ha cuestionado el liderazgo de la presidenta. En todo caso, eso no es efectivo, jamás el parlamento ni los parlamentarios hemos tratado de cogobernar, simplemente estamos cumpliendo con nuestra obligación que es legislar.
En tanto el Senador Jaime Naranjo en su calidad de Presidente de la Comisión de Derechos Humanos señalo que las expresiones de los empresarios no le llaman la atención, ya que siempre que ven amenazados sus intereses reaccionan en forma desproporcionada y destempladas.
Lo que si me parece una insolencia son sus alusiones sobre una supuesta debilidad de la Presidenta Bachelet, más aún cuando se encontraba representando a nuestro país ante la ONU. Esto demuestra que a los empresarios no les interesa la imagen internacional de Chile, si no solo sus intereses económicos. Además no puede dejar de llamarnos la atención que sus argumentos son los mismos que utiliza la UDI y RN para debilitar el accionar de nuestro gobierno.
Los Socialistas no dejaremos nunca de luchar porque los Derechos de los trabajadores, que forman parte de los Derechos Humanos sean plenamente respetados y aumentados progresivamente, aunque algunos les duela y se pongan nerviosos.
Tengo clara conciencia que los chilenos no se dejaran engañar por esta campaña del terror a la cual cada cierto tiempo los grandes empresarios nos tienen acostumbrados y seguiremos impulsando como siempre las reformas laborales.
Santiago de Chile, 26 de spetiembre 2007
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