La realización de este Encuentro Iberoamericano que tendrá se realizará en forma paralela a la XVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y Gobierno, los días 7, 8, 9 y 10 de noviembre del presente año.
Los organizadores señalaron a Crónica Digital que esperan que la “cumbre sea un espacio abierto y fraternal para que los representantes de las luchas libertarias del continente, en un marco de pluralismo y democracia”.
Podamos analizar nuestras realidades, compartir visiones y propuestas y crear redes solidarias que nos unan para enfrentarnos a la arrogancia del gran capital transnacional que niega nuestro derecho a la autodeterminación, señalaron.
Entre los objetivos que persigue este Encuentro, que se desarrollará como Foro Social y Debates Temáticos, se encuentran:
Ser una instancia de reflexión, discusión y diálogo de los actores sociales y políticos del Continente y de éste con Europa (a través de la participación de España y Portugal) sobre los desafíos de los pueblos en esta hora de la humanidad (Globalización) y de nuestro continente.
Además, dar continuidad al debate de diversos temas relevantes en relación con la economía, los movimientos sociales, los pueblos originarios, la biodiversidad y el medio ambiente, los recursos naturales, su acceso y las fuentes de energía, las políticas de equidad de género y la actoría de los jóvenes, el desarrollo cultural y otros, que se han venido programando en las Cumbres Sociales anteriores.
Profundizar las causas de la injusticia o discriminación social que viven nuestros pueblos y las limitaciones de las políticas públicas, que serán debatidos por los Gobiernos de la Cumbre Iberoamericana.
Apuntar hacia concepciones democráticas que releven el valor de las Asambleas Constituyentes, como ejercicios indispensables para una verdadera democratización de nuestro Continente, todavía atado a las instituciones que nos legaron las dictaduras de los 70/ 80, proceso que no ha podido ser recuperado con transiciones parciales o a medio camino, con ejercicios electorales formales y vacíos, o con legislaciones de amarre, que le dejan el campo libre del poder a las multinacionales y los grupos económicos y las oligarquías locales.
Por último, avanzar en la coordinación de acciones sociales en la país y en la región a fin de lograr los cambios que queremos y aprovechando los lazos y los pasos ya construidos y logrados.
En esta Cumbre, más que en ninguna otra de la historia, estarán presentes numerosos Jefes de Gobierno, quienes -apoyados en las fuerzas populares- rechazan la subordinación al imperialismo y adhieren resueltamente al ideario de integración y unidad iberoamericana. Esperamos que el pueblo chileno tenga la oportunidad de escuchar su mensaje en una gran manifestación pública de solidaridad y compromiso con el gran proyecto bolivariano.
La Cumbre por la Amistad, la Justicia Social e Integración de los pueblos de Iberoamérica reafirmará con fuerza el anhelo de todo un continente, expresado con visión histórica por el Presidente Allende, hace 35 años, en las Naciones Unidas: Son los pueblos, todos los pueblos al sur del Río Bravo, que se yerguen para decir: ¡Basta! ¡Basta a la dependencia! ¡Basta a las presiones! ¡Basta a la intervención!
Entre los convocantes se encuentran de ANAMURI; Universidad ARCIS; Centro de las Culturas; Representantes de la Alianza Social Continental (ASC), coordinadora de los movimientos sociales a nivel internacional; la CUT; FECH; Estudiantes Secundarios; los partidos Comunista, Izquierda Cristiana, Humanista, Socialista y Democracia Cristiana.
Santiago de Chile, 12 de julio 2007
Crónica Digital , 0, 67, 3