El Transantiago comenzó sin considerar el concepto de Diseño Universal y en este contexto quienes reciben el trato más degradante son las mujeres y los niños con discapacidad.
El acceso al transporte es un derecho, cuyo ejercicio efectivo permite hacer valer necesidades fundamentales como el acceso a la salud, rehabilitación, educación, capacitación y trabajo. El Transantiago atropella todos estos derechos al no contemplar la accesibilidad para las personas con discapacidad.
La Fundación que trabaja desde 1985 y tiene entre sus logros la presentación del proyecto de ley que dio origen a la Actual Ley de Integración Social para personas con discapacidad en Chile (Ley 19.284 la incorporación de accesos en la línea 5 del Metro y varios proyectos de Ley en el Senado de la República, señala que siempre han propuesto los cambios al Ejecutivo para lograr disminuir en parte la enorme exclusión en que viven las personas con discapacidad en Chile.
El Transantiago es violento y discriminador, señaló Alejandro Hernández, experto en discapacidad y Presidente de la Fundación cuya Misión es lograr la Plena Integración Social de todas las personas con discapacidad y sus familias. Señala que solicitaron una reunión hace un mes con el recién destituido Ministro Sergio Espejo y nunca obtuvieron respuesta de su parte. Nos preguntamos si alcanzaremos a gestionar la entrevista con el nuevo Ministro antes de que sea rotado, indicó.
Señalaron que actualmente el sistema de transporte público en Santiago y Provincias, burla la Ley de la Discapacidad Chilena, las Normas Uniformes para la Integración de las personas con discapacidad (ONU 1993), los derechos de las mujeres y los niños, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención de los Derechos de las personas con discapacidad (ONU 2007).
Estos instrumentos internacionales proclaman que los derechos reconocidos se deben conceder por igual a todas las personas sin ningún tipo de discriminación. La ley chilena establece a su vez que cada nuevo medio o sistema de transporte debe considerar accesos especiales para personas con discapacidad.
El 90% de cesantía entre las personas en edad de trabajar y un 97% de ausencia de salud y rehabilitación en los niños, dejan a Chile en mala posición ante la firma de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, cuya ratificación será el 30 de Marzo en la ciudad de Nueva York. Chile va con nota roja a Nueva York, señala Alejandro Hernández.
En Chile las personas con discapacidad alcanzan más de 2 millones y medio y 750.000 se encuentran en Santiago. Si a esto agregamos dos a tres personas de la familia que les acompañan a diario, estamos frente a una realidad que afecta profundamente a más de ocho millones de personas en Chile
Hoy lo que vemos con el Transantiago es una doble y triple discriminación por parte del Estado chileno y las empresas concesionarias. Hay que Rehabilitar urgentemente al Transantiago y educar a las partes involucradas para que no sigan reprobando el ramo de la Discapacidad, señaló Hernández.
La Fundación Nacional de Discapacitados hace un llamado a la Presidenta Michelle Bachelet, considerando los malos tratos que brinda Chile a las personas con discapacidad. A su vez propone a la mandataria y al Ministerio de Transportes el siguiente paquete de 5 medidas urgentes:
1. Implementar la Tarjeta Accesible Gratuita en Santiago y Provincias
2. La instalación de rampas hidráulicas en todos los buses
3. Rampas y ascensores para discapacitados en la línea 1 y 2 del Metro de Santiago.
4. Semáforos con sonido para personas con discapacidad visual
5. Mejora definitiva de pavimento de calles y veredas.
Por Alejandro Hernández. El autor es director de la Fundación Nacional de Discapacitados, desde 1985 por la reivindicación de los Derechos Humanos de las personas con discapacidad.
Santiago de Chile, 2 de abril 2007
Crónica Digital
, 0, 16, 3