El órgano estatal está sujeto a una investigación judicial luego que una auditoría de la Contraloría General reveló la pasada semana irregularidades en el manejo de fondos públicos en el 90 por ciento de los proyectos revisados en los últimos tres meses de 2005.
Una parte importante del dinero involucrado (más de 300 mil dólares) habría sido desviado para campañas políticas de candidatos de los partidos del gobierno en los pasados comicios (diciembre-2005), según denuncias de la oposición de derecha.
“Tenemos que aumentar la transparencia y el control presupuestario, no dar más pie al clientelismo político y la impunidad”, señaló Pablo Lorenzini, presidente de la comisión de Hacienda del Senado.
Su contraparte de la Cámara Baja, el diputado Carlos Ominami, anunció que la revisión implicará una de las discusiones más rigurosas que ha tenido lugar en torno a presupuestos en los últimos años, aunque sin ser en todo caso “implacables”.
Los líderes de la comisión legislativa en ambas cámaras asumieron un compromiso de “mano dura contra los corruptos”, que contempla aumento de penas para los delitos de fraude al Fisco, malversación y asociación ilícita.
Pidieron asimismo a la presidenta Michelle Bachelet que envíe al Congreso leyes que endurezcan las sanciones para quienes cometan estos delitos.
Ominami dijo esperar “que esto no pase de un caiga quien caiga a un sálvese quien pueda”, aludiendo a que en el caso de Chiledeportes había dos comisiones investigadoras y un informe de fiscalización del año pasado que no fueron tomados en cuenta por los parlamentarios.
En la misma línea, recalcó la necesidad de que la Contraloría explique cómo eligió la muestra aleatoria que revelaron anomalías en los fondos de Chiledeportes, ante la sospecha de que quienes hicieron el informe “fueron pautados para ir con pinzas sobre algunos casos”.
La propuesta de los parlamentarios también apunta a fortalecer la Contraloría que, según afirman, también ha cometido errores, para profesionalizar su trabajo y evitar su instrumentalización política.
Los parlamentarios propusieron un plan de control presupuestario en materia de transparencia, ejecución y desempeño, que incluye la unificación de la dirección de programas dispersos en diferentes instancias y la designación de gerencias de alto nivel.
Asimismo, plantearon la instalación de directorios independientes similares al constituido para los convenios de obras complementarias del Ministerio de Obras Públicas y la realización de auditorias independientes, llamadas de concurso, todos los años.
Otro aspecto importante en el manejo de los presupuestos, a juicio de los legisladores, es mejorar los sistemas de evaluación de los programas de los distintos Ministerios y reparticiones públicas, y la construcción de indicadores por el órgano nacional de Estadísticas.
Santiago de Chile, 31 de octubre 2006
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