La empresa forestal controlada por el empresario Anacleto Angelini, propietaria de las plantas de celulosa en Valdivia y Nueva Aldea, es la más grande de América Latina y figura en el lugar número 39 de las más importantes del mundo, mejorando 3 escalones respecto al ranking 2004-2005.
El ranking se elaboró en base a las ventas anuales de 2005 de cada compañía considerando el rubro forestal, celulosa, papeles, tissue, envases y embalajes, entre otros productos.
El grupo Arauco (Celco) posee ventas equivalentes a unos US$ 2 mil 400 millones (1.907 millones de euros).
Según el informe, hubo factores económicos que afectaron a la industria en este período, como las fluctuaciones en los tipos de cambio y el incremento del costo de la energía, transporte y materiales de construcción, donde no tuvo relevancia la disminución de un 20 por ciento en el tonelaje de producción de la planta Valdivia de Arauco (Celco).
COMUNIDAD VECINA A CELCO OPINA
Las comunidades afectadas por el modelo de gestión de la empresa, como Valdivia o Ránquil opinaron sobre las razones que explican el liderazgo de la empresa Arauco (Celco).
Víctor Herrero, empresario turístico fluvial de Valdivia explicó que tales utilidades son explicables debido a que la empresa aumenta sus utilidades a costa del medio ambiente y de la comunidad.
Es obvio que la empresa tenga esas tremendas utilidades, dijo el empresario, quien ha visto afectado el negocio turístico de la ciudad humedal, debido a la contaminación industrial certificado por un estudio científico encargado por el gobierno, de uno de los destinos más importantes de Valdivia: el santuario de la Naturaleza.
En tanto, José Araya, profesor de Historia y vocero del movimiento ciudadano Acción por los Cisnes de Valdivia, explicó que el margen de utilidad de la empresa es altísimo en relación a otras empresas del mismo rubro en el mundo.
Es una empresa que tiene altas rentabilidades a costa de sus impactos sociales y ambientales, los cuales son altísimos y, así, disminuyen los altos costos de sus actividades de producción y exportación. Esto explica por qué Celco tiene el poder que tiene en Chile y puede evitar toda posibilidad de sanciones o cambios sustantivos en su forma de producción, dijo.
De la comuna de Ránquil, donde se ubica la planta de Nueva Aldea de Celco, Héctor Rabanal, manifestó que mientras la empresa obtiene mayores utilidades, la comunidad local se empobrece.
Estamos muy mal con los ruidos y los olores. Yo me pregunto: y si tienen tanta plata, ¿por qué no nos compran ellos la parcela? ¿Por qué tenemos que aguantar los malos olores y los ruidos? Nosotros, los viñateros de la zona estamos trabajando a pérdida con Celulosa Arauco. Ellos ganan y nosotros perdemos, entonces si tienen tanta plata por qué se aprovechan de nosotros, dijo.
Por: Miguel Angel Navarrete
Temuco, 11 de octubre 2006
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