Excepcionalmente, se podrá contar con la autorización para llevar contabilidad simplificada por parte del Director Regional del SII correspondiente al domicilio comercial de la empresa. En otras palabras, se deberá mantener sólo el libro de ingresos y egresos, o bien una simple planilla, lo que dependerá de la actividad económica que se desarrolle.
Pequeños contribuyentes con situación especial que no estén obligados a llevar contabilidad, sin perjuicio de llevar un registro o libro de ingreso diario cuando estén sometidos al sistema de pagos provisionales en base a ingresos brutos.
Exigencias tributarias
Todo contribuyente que se encuentre bajo el régimen de renta efectiva, demostrada con contabilidad completa y balance general, deberá llevar el Libro Diario, Libro Mayor y Libro de Inventarios y Balances. Además, deberá considerar un libro especial denominado Registro de la Renta Líquida Imponible de Primera Categoría y Fondo de Utilidades Tributables (FUT) y aquellos libros auxiliares exigidos por la ley o el SII, como es el caso, por ejemplo, del Libro de Compras y Ventas y del Libro Auxiliar de Remuneraciones.
A propósito de los libros contables, no existen formatos establecidos para llevarlos, puesto que hay normas tributarias que exigen los datos mínimos que deben ser registrados en los libros, según las prácticas contables adecuadas que permitan reflejar claramente el movimiento y resultado de los negocios de la empresa. Con respecto a los libros auxiliares, éstos deberán cumplir con los requisitos mínimos establecidos, contenidos, por ejemplo, en los artículos 74 y 75 del Reglamento de la Ley sobre Impuestos a las Ventas y Servicios.
Datos claves
Por regla general, ningún contribuyente se exime de mantener ejemplares impresos de los libros contables. La única excepción la constituye el Libro de Compras y Ventas llevado por sistemas computacionales, que deberán ser impresos sólo por solicitud expresa del SII.
Un libro contable podrá ser utilizado al año siguiente del que fue efectivamente timbrado por el SII, si es que no es usado en su totalidad.
Si se comete un error en un libro de contabilidad, éste no podrá ser enmendado de acuerdo con las disposiciones del Código de Comercio. Dado lo anterior, la manera de corregir posibles errores en los libros de contabilidad es mediante la utilización de un asiento contable que salve o revierta el efecto del error.
Existe un Libro Control de Documentos que permite a los contribuyentes realizar sus actividades en más de un establecimiento y controlar la asignación de los documentos timbrados a los otros restantes.
Santiago de Chile, 3 de julio 2006
Crónica Digital/SII , 0, 290, 12