Bachelet llegó esta mañana a Iquique -capital de la Primera Región- procedente de República Dominicana, última escala de una gira que la llevó a Estados Unidos, Jamaica y Haití, para sostener una reunión de trabajo con parte de su gabinete ministerial.
La mandataria pretende hacer una evaluación sobre el terreno de la marcha del plan de reconstrucción elaborado por el gobierno del ex presidente Ricardo Lagos (2000-2006), luego del fuerte terremoto del 12 de junio del pasado año que devastó parte de ese territorio.
Su regreso coincide con una fuerte ofensiva de la derecha opositora, que acusa a su gobierno de contradicciones e improvisaciones a propósito de la protesta estudiantil concluida el pasado viernes tras tres semanas de paros, tomas de escuelas y manifestaciones callejeras.
El senador de la Unión Demócrata Independiente (UDI) Hernán Larraín señaló que el llamado de atención efectuado por Bachelet a sus ministros antes de cumplir los 100 días de su mandato, dan una mala señal de la capacidad de su gobierno para cumplir las metas propuestas.
“El hecho que la Presidenta tenga que juntar a toda su gente para retarlos a menos de tres meses del gobierno, eso demuestra que hay improvisación, que hay contradicciones, que no hay un equipo capacitado para llevar adelante al país, para conducir al país”, dijo Larrain.
El recién electo timonel del principal partido opositor subrayó que “quizás es otra de las consecuencias que nos preocupa porque a tan poco andar, un gobierno que no logra enmendar un rumbo, que no sabe qué hacer es una mala señal para el país”.
Sus críticas fueron calificadas como poco imaginativas por el ministro del Interior, Andrés Zaldívar, poco antes de partir ayer hacia Iquique junto a los titulares de Vivienda, Obras Públicas, Educación, Salud y Mideplan para la reunión de mañana con Bachelet en esa ciudad.
Zaldívar, quien actúa como jefe de Gabinete, dijo que este “será un muy buen Gobierno”, pues no pueden exigir soluciones en 80 días a problemas que llevan decenas de años, como es el caso de la Educación, que dio origen al conflicto estudiantil.
Insistió en que gobierno cumplirá con las 36 medidas propuestas y en los cuatro años de gestión hará todo lo que tenga hacer para mejorar la situación del país, especialmente en el aspecto social y de una mayor democracia.
Bachelet permanecerá varias horas en la capital de la Primera Región, instancia que aprovechará para evaluar el Plan de Reconstrucción de las zonas azotadas por el terremoto y que presentan un alto nivel de postergación y de retraso.
El gobierno del ex presidente Lagos anunció el año pasado el desarrollo de 291 proyectos, con un costo de 29 mil millones de pesos (poco más de 60 millones de dólares) para enfrentar la catástrofe, pero el plan está lejos de cumplirse.
Santiago de Chile, 11 de junio 2006
Crónica Digital/PL
Santiago de Chile