La conmemoración fue presidida ayer por el cardenal Francisco Javier Errázuriz y estuvieron presentes el ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, dirigentes sindicales, parlamentarios y la recién electa líder de la Democracia Cristiana, Soledad Alvear.
Errázuriz apoyó el proyecto de ley que regula la subcontratación y pidió trabajar para mejorar la equidad en el sistema de pensiones, entre otras iniciativas que lleven a aliviar la creciente explotación de miles de trabajadores chilenos.
La homilía estuvo a cargo del Vicario de la Pastoral Social y de los Trabajadores, Rodrigo Tupper, quien exhortó a las autoridades y legisladores a considerar, ante todo, “los valores de la solidaridad y la dignidad humana como la medida última de sus leyes”.
Al término de la misa el cardenal Errázuriz insistió en la idea de terminar con lo que denominó “el escándalo de la desigualdad” que, según él, se expresa en el acceso al trabajo, salarios dignos y justicia social.
“Resulta doloroso ver a personas que han entregado lo mejor de si durante su vida entera y que al final cuentan con unas pensiones mínimas, que no les permiten vivir con dignidad”, agregó el arzobispo.
Tupper, por su parte, se ofreció para actuar como “puente” en el debate entre empresarios, empleados y gobierno, con la idea de mejorar las condiciones laborales.
El sacerdote recalcó que “la iglesia, por vocación, siempre quiere tender puentes y poner las mesas, de tal modo que los distintos actores sociales, que a veces pueden estar divididos en sus opiniones puedan tener un lugar, un espacio donde se puedan encontrar y entender”.
Santiago de Chile, 2 de Mayo 2006
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