Precisa el texto que analfabetismo no es sólo la incapacidad de leer y escribir.
Cuando se habla de analfabetismo, existen varias realidades las cuales debemos de tener claras, dice el comentarista Luis Barrios.
“Una realidad es que el analfabetismo es utilizado por quienes administran nuestros gobiernos como un instrumento de control para logros políticos, sociales y económicos”, asevera.
Precisa que la escolaridad no resuelve automáticamente el problema de analfabetismo funcional, en especial el analfabetismo político existente en el país.
Añade, como ejemplo del problema, que los norteamericanos no entiendan que también son víctimas de las medidas del modelo neoliberal impuesto por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en concubinato con los gobiernos.
“No entender este asunto es lo que estoy llamando analfabetismo político”, acentúa.
El comentarista invita a tratar “de emprender una conversación sobre este asunto del liberalismo con residentes en Estados Unidos y usted notará inmediatamente cómo la ignorancia puede ser tan atrevida”.
Ponen en tela de juicio el que usted les diga que siendo el país más rico del mundo y que más dinero usa anualmente en gastos médicos, Estados Unidos tenga unas 46 millones de personas sin seguro de salud.
Añade que “el asunto es más serio cuando se trae a la discusión la penosa realidad que unas 18 mil personas mueren anualmente por no tener o por tener cobertura insuficiente en seguros médicos”.
Por otro lado, plantea, emprenda una conversación sobre la realidad que en Estados Unidos unos 14 millones de niños sufren de hambre y el descubrimiento de la ignorancia estadounidense hará su entrada triunfal.
Al ampliar sobre el analfabetismo político, Barrios pone otros ejemplos increíbles para los estadounidenses, quienes ignoran que en su país uno de cada tres niños vive en la pobreza y uno de cada cuatro se acuesta con hambre.
La ignorancia lleva a los “analfabetos” a desconocer que unos 32 millones de personas, incluyendo los niños, sufren de hambre.
“No entender este asunto es lo que estoy llamando analfabetismo político”, concluye Barrios.
Washington, 12 febrero 2006
Prensa Latina , 0, 94, 2