Lo que buscaban con eso era vencernos por el hambre y las necesidades de nuestras familias, señalaron en una declaración pública.
En la empresa de artículos eléctricos, SAIME, hace DIEZ AÑOS que los sueldos de los trabajadores no tienen ningún reajuste.
Apelando a las normas de la OIT, y cansados de tanta indolencia, los trabajadores y su sindicato decidieron entonces tomarse la empresa. Y lo hicieron el jueves 17.
Recibieron la solidaridad de la CUT zonal; de sindicatos de trabajadores de Nestlé y Metalpar; del Juntos Podemos Mas y su candidato a diputado, Juan Andrés Lagos. Todos presentes en momentos en que fuerzas policiales llegaron a las puertas de la industria.
La presión tuvo su efecto: la empresa accedió a dialogar los el sindicato.
Primera vez que lo hace, y primera vez que lo reconoce como representante de los trabajadores. Es un logro.
Ahora, el sindicato trata de convencer a esto malos patrones, que deben (y pueden) reajustar los salarios, y desarrollar de otra forma la relación entre dueños y trabajadores.
Un buen ejemplo de lo que importante que es la unidad y la determinación de luchar por lo que es justo.
Santiago de Chile, 19 de noviembre 2005
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