El conjunto de obras de pequeño formato es parte de su bitácora de viajes, es una selección de anotaciones pictóricas realizadas por Ortizpozo entre 1968 y 2005.
La poética de la obra incluye paisajes, arquitectura, objetos y personajes interpretaciones simbólicas de sus viajes a territorios andinos que en el pasado correspondieron al Tahuantinsuyo.
Ubicada en la parte bohemia de esta capital, la librería-galería La Pomaire fue el lugar escogido para exhibir esta muestra, realizada en acrílico sobre papel.
De acuerdo con Ortizpozo, estas son postales «desde la cuna del relámpago y del hombre», tomando el verso de Neruda que se refiere a Machu Picchu y aludiendo figuradamente a la ciudadela inca en sustitución de ese todo que fue el Tahuantinsuyo.
El pintor ensaya también el ensamblaje, para potenciar el lenguaje plástico, y logra con este recurso obras muy meritorias.
En varias de sus pinturas se expresa en diferentes registros plásticos y en todos conjuga un oficio perfeccionado a lo largo de mucho tiempo, la sabiduría que, amén de sus estudios, le ha dado el contacto personal con los herederos de las antiguas culturas.
Ortizpozo figura entre los pintores más importantes de Venezuela, donde también ha dado a conocer, en el mundo académico, sus investigaciones y reflexiones sobre diversos temas relacionados con la cultura y la docencia.
Amante del proceso bolivariano que impulsa el presidente Hugo Chávez en el territorio venezolano, este es uno de los maestros que ha incorporado su arte a la revolución que avanza en ese país.
En su historial, se destaca el Premio Oriente, de la III Bienal de Artes Visuales, efectuado en 1995 en el Museo Municipal de Arte Moderno, Puerto La Cruz, Venezuela y la mención en especialidad de Dibujo, recibida en la Primera Bienal de la Habana Cuba.
Quito, 21 de noviembre 2005
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